jueves, 16 de diciembre de 2010

Altos vuelos

Esto es formidable. La experiencia más impactante de mi vida. Yo soy un pueblerino, no es que me precie de saber mucho. Más bien sé muy poquito. Pero desde hace un tiempo vengo experimentando placeres, emociones, sabores y olores, de los que no tenía constancia, no los conocía.
El Amor es así: llega sin avisar, cuando quiere, y nos encontramos de repente en un mundo desconocido, y al mismo tiempo, muy cercano, muy impactantemente próximo, dentro de nosotros, desde fuera hacia dentro, dentro de nuestro cuerpo, de nuestro corazón, nuestros huesos, todo nuestro cuerpo. Quien ha estallado de emoción, lo sabe. Todo se funde, se tiembla con el estremecimiento de haber volado muy muy alto, y luego, cuando se vuelve a bajar, las emociones perduran, se hacen caricias permanentes, endulzadas por la memoria.
Cuando estas experiencias son a través de estos nuevos canales de información, o de transmisión, puede decirse que se inaugura una nueva forma del Amor. Aunque estas prácticas fueron inventadas tiempo atrás, pero por parte de quien escribe nunca se habían dado posibles. Es por eso, que si yo algún día tengo nietos, nietas, no dudaré en contarles la batallita del abuelo,del abuelo y la abuela, aquella en que nos creíamos parte de un universo finito, el de Internet, pero al que accedíamos de manera cotidiana, incluso encontrando a Nuestro Amor..Fíjense si le deberemos, hoy o mañana, a servicios de conversaciones instantáneas, y cosas así..Y tanto. Uno está en su casa, es dueño de todo movimiento, y además tiene el teléfono, al que puede utilizar para lo que nunca había hecho. Entonces, y como sin proponerlo, se establece un diálogo que deriva en el Amor más pleno, el placer, la lujuria, el ardiente y más caliente sexo y erotismo, la seducción constante, la ficción aventurera que desemboca en realidad apabullante, indescifrable, encantadora, mágica. Unica.
Nuestra capacidad de amar es infinita. Debemos ponerla en práctica más seguido. Todo el tiempo. Todo el tiempo pensando, sintiendo, más que pensando. Sentir el Amor. Necesitar Amar.. Ese verbo maravilloso, esa nostalgia de cosas que han cambiado, como decía el Tango, pero sin embargo están siempre ahí, siempre están, esperándonos, esperando que las despertemos, y que nos despertemos al Amor, a la Vida, a la Vida con mayúsculas. Y poder decir: MI VIDA. Y poder sentir y decir: TE AMO..
Eso deben probarlo, cultivarlo algún día, amigos y amigas. Hay que esperar, algún día llegará. No hay que pretender cazarlo al vuelo, es un proceso muy lento, y dilatado en el tiempo. Pero llegará.
Este texto está dedicado a ustedes, además de, en primer lugar, a Mi Amor. Está dedicado a ustedes, con Amor. Hasta el próximo programa, querida audiencia de Hablaralto.